Comida exótica en México: Insectos

Sabías qué en México hay nada más y nada menos que 549 especies comestibles de insectos que se degustan y cocinan a lo largo y ancho de la República Mexicana.

La entomofagia o ingesta de insectos, es una práctica que se remonta a la época prehispánica, debido a malos tiempos y escasez de alimentos que vivieron algunas culturas, por lo que lo único que podía alimentarlos era la proteína de los insectos.

Pero que les parece si mejor vamos a conocer  el dónde encontrarlos y cómo se preparan algunas de estas crujientes delicias de la gastronomía mexicana.

Insectos de la comida mexicana

Gusano de maguey 

Estados: Hidalgo, Tlaxcala, Estado de México y Oaxaca.

¡Estos si son hijos del maguey! El gusano de maguey es una larva de mariposa que crece en las pencas y raíces del maguey en época de lluvias. Son caros porque al extraer sólo de dos a cuatro gusanitos el maguey muere y requiere varios años para que esta planta llegue a su madurez. Se preparan fritos, se pueden sazonar con sal al gusto y se sirven en un buen taco o de solapa.

Gusano grande de agua o tsats 

Estado: Chiapas

El tsats, que significa gusano en tzotzil, estos insectos crecen entre los árboles de caulote de varios municipios chiapanecos en los meses de julio y agosto. Se preparan hervidos, aunque también se doran con sal, limón y chile.

Escamoles

Estados: Guanajuato, Hidalgo y Tlaxcala.

Conocido en el mundo como “el caviar mexicano”, son las larvas de la hormiga, que se comen fritas con mantequilla y epazote, también se preparan en mixiote, en mole y en barbacoa, aunque hay miles de recetas. Los meses en donde se recolectan son marzo y abril. También se les llama azcamolli, huigues o maicitos.

Chinches de mezquite, xohues o shamues

Estados: Hidalgo y Querétaro.

Son unos insectos que viven en los mezquites y son muy utilizados en la Huasteca hidalguense. Deben capturarse por la cabeza, con el propósito de obligarlo a vaciar un líquido amarillento y apestoso que les sirve de defensa. Su preparación es similar a la de los chapulines: se depositan en una cubeta de agua con cal y se dejan reposar. Después, se cuecen en limón y sal y se asan vivos en el comal y se guisan con salsa para inmediatamente  comerse en tortillas de maíz recién hechas. Además se utilizan como rellenos en albóndigas o en tlacoyos y también como aderezos en carnes. La temporada para consumirlos es entre marzo y mayo. En Querétaro se conocen como tantarrias.

Chinicuil o gusano de mezcal

Estados: Hidalgo y Oaxaca.

Se recogen como larvas hacia finales de agosto y para septiembre nacen estas orugas conocidas como gusano rojo o gusano colorado. Se tuestan en un comal donde son arrojadas vivas o se fríen hasta tostarse y se sirven sobre una tortilla untada con guacamole. También se muelen con tomate y chile pasilla para hacer una salsa. Se utilizan también para dar sabor y color a algunas variedades de mezcal.

Cupiches, chamas, huenches o conduchas

Estado: Michoacán.

Son los nombres comunes dados a las larvas de la mariposa del madroño. Se recolectan siendo capullos y su preparación es muy sencilla pues sólo se tuestan en el comal.

Jumil

Estados: Guerrero y Morelos.

Aunque no lo creas, estos insectos, que se comen vivos, tienen un característico sabor a canela proveniente de los tallos y las hojas de los encinos de los cuales se alimentan. En la época prehispánica se recolectaban para la celebración del día de muertos. Y para que veas lo importante que son, en el Cerro del Huixteco, en el municipio de Taxco, Guerrero, existe un templo dedicado a ellos.

Cuetla, chiancuetla o tepolchichic

Estados: Guerrero, Veracruz y Puebla.

Así se le conoce a las larvas de mariposa que crecen en las plantas de chía, cuaulote, jonote y tlahuilote. Se recolectan sus orugas en temporada de lluvias y se hierven, secan o se tuestan en el comal. Se suelen comer en tacos de tortilla de maíz, condimentados con salsa de chile pasilla. Como lo mencionamos comen en la mixteca del estado de Guerrero y en el centro de Veracruz y Puebla.

Chapulines

Estados: Oaxaca y el Valle de México.

El chapulín era ya cocinado desde los mexicas, zapotecas y mixtecas antes de la llegada de los españoles y se caracterizan por su color rojizo. Se cocinan tostándolos y dorándolos. Puedes encontrarlos para botanear, hechos en salsa, tamales o tostadas.

Axayácatl (chinche de agua)

Estados: Cuenca Lacustre del Valle de México, Estado de México y en Oaxaca.

También es llamada “mosco para pájaros” y se conoce desde la época precortesiana. Las crónicas de los evangelizadores cuentan que Moctezuma era afecto a estos insectos junto con sus huevecillos (ahuautle o ahuahutle) y eran traídos desde Texcoco por corredores nativos hacia Tenochtitlán, por lo que los consumía frescos en el desayuno. Se tuestan, mientras que la ahuautle se suele preparar en tortas rebozadas en huevo y fritas, o en tamales o mixiotes.

Hormiga chicatana

Estados: Guerrero y Oaxaca.

Estos insectos se comen cuando comienzan las lluvias de junio en forma de salsa, sopa, tamales o guisados para comer en tacos. En algunos poblados  se les llama tzicatana.  Debido a la dificultad para encontrarlas son costosas (pueden llegar a alcanzar hasta los 1000 pesos por kilo).

Libélulas

Estados: Sonora, Hidalgo y Estado de México.

Existen alrededor de seis números de especies y se consumen en estado de ninfas.

La proteína de los insectos  aporta los aminoácidos esenciales que necesita nuestro organismo.

Imagen de portada: marcianosmx.com