Vender Cuba en época de apagones
Vender Cuba en época de apagones exige creatividad y realismo. Conoce cómo los agentes pueden promocionar el destino entre crisis, escasez y turismo en caída.
Vender Cuba en época de apagones: un desafío turístico
La isla enfrenta apagones de hasta 20 horas, afectando ciudades como Santiago y Holguín. Implica transformar esta crisis en relatos turísticos que atraigan a un viajero curioso y resiliente. Algunos operadores lo llaman “desconexión caribeña”, aunque detrás del eslogan hay incomodidades reales que requieren manejo cuidadoso.
Vender Cuba en época de apagones y la caída del turismo
El país pasó de 5 millones de visitantes a poco más de 2 millones en 2024. Hoteles vacíos, apagones y desabasto explican la crisis. Significa encontrar oportunidades donde la estadística muestra retrocesos. Para agentes mexicanos, este escenario también abre la puerta a clientes que buscan vivir experiencias distintas, más allá de los típicos resorts del Caribe.
precios altos
La inflación disparó los costos y redujo el valor del “todo incluido”. Menús recortados, falta de insumos y cócteles improvisados forman parte del panorama. Implica honestidad con el viajero informado y capacidad de recomendar temporadas o destinos dentro de la isla donde los servicios son más consistentes.
Dos realidades al vender
Existen dos Cubas: resorts con divisas donde hay abundancia y barrios apagados donde falta lo básico. Requiere sensibilidad y discurso ético, mostrando tanto los contrastes como la hospitalidad local. El viajero consciente valorará más una recomendación transparente que una postal distorsionada.
Estrategias
Los agentes pueden apelar a la autenticidad y resiliencia:
- Promover experiencias culturales reales.
- Posicionar la ironía como recurso comunicativo.
- Resaltar la hospitalidad cubana como valor agregado.
- Recomendar reservas anticipadas para asegurar disponibilidad.
Conclusión: vender
El desafío es presentar la isla con luces y sombras. Vender Cuba en época de apagones exige creatividad y transparencia para atraer viajeros que buscan autenticidad más allá de la postal turística. En medio de crisis y resiliencia, Cuba sigue siendo un destino único que, bien posicionado, puede conquistar a un perfil específico de viajero.
