Gonzalo del Peón
Un desayuno para escuchar al arquitecto del Olimpo hotelero
Tuvimos la oportunidad de escuchar a Gonzalo del Peón, uno de los arquitectos del Olimpo hotelero latinoamericano, en una reunión convocada por la querida Yarla Covarrubias, presidenta y directora general de MAPRESA, quien reunió a colegas y amigos del turismo en la elegante Hacienda de los Morales.
El motivo: una conversación abierta y luminosa sobre el pasado, presente y futuro del “todo incluido”, esa criatura que Del Peón ayudó a moldear hasta convertirla en símbolo de sofisticación caribeña.
Con casi cuatro décadas de trayectoria, Gonzalo recordó los orígenes de su carrera: ingeniero de formación, con paso inicial por Procter & Gamble, donde nació su pasión por el marketing. Aquella curiosidad lo llevó a estudiar una Maestría en Marketing Internacional en Bilbao y un MBA en el IPADE, para después integrarse a Grupo Posadas, donde reestructuró Fiesta Rewards y durante 17 años escaló hasta la Vicepresidencia Corporativa de Mercadotecnia y Comercial.
El nacimiento de un nuevo paradigma
El año 2001 marcó el giro decisivo. Junto a Alejandro Zozaya y Javier Coll, Gonzalo cofundó AMResorts con una idea tan sencilla como revolucionaria: demostrar que el “todo incluido” podía ser tan lujoso, refinado y deseable como cualquier resort europeo de alta gama.
Desde su cargo como Vicepresidente Ejecutivo Comercial, diseñó la arquitectura operativa, los estándares de servicio y el modelo de negocio que cambiarían para siempre la hotelería del Caribe.
En 2012, con 25 hoteles y más de 9 000 habitaciones, asumió la Presidencia de AMResorts. Nueve años después, la cifra ascendía a 99 hoteles y más de 31 000 habitaciones, consolidando a la compañía como la cadena de resorts de lujo de mayor crecimiento en Norteamérica.
Durante esa etapa creó también el Unlimited Vacation Club®, programa de lealtad premium que superó los 100 000 miembros y profesionalizó la fidelización turística antes de que la industria siquiera lo sospechara.


De ALG a Hyatt: la expansión del imperio
En 2021, Hyatt adquirió Apple Leisure Group (ALG) y, con ello, incorporó al genio detrás del modelo. Desde su nuevo cargo como Group President Americas & Global Commercial, Gonzalo del Peón lideró la integración del portafolio Inclusive Collection, dotando a Hyatt de músculo en un terreno donde el lujo se mide en experiencias.

Los beneficios fueron evidentes: tecnología avanzada, un canal directo fortalecido y la poderosa red de World of Hyatt.
Pero el éxito también trajo fricciones: decisiones más centralizadas, burocracia global y la urgencia de conservar el toque humano y la flexibilidad que habían hecho grandes a los resorts del Caribe.
Como él mismo resumió, “el desafío no es crecer: es no perder el alma mientras lo haces.”

Dónde el “todo incluido” respira… y dónde se ahoga
El debate sobre el modelo se tornó técnico y apasionante. El “todo incluido” funciona, sí, pero solo donde hay ocupación alta, mercado norteamericano sólido y una operación que respira servicio.
Cuando la demanda flaquea, el producto se diluye: se apagan los shows, se apagan los fogones y se apaga el brillo.
En destinos como Cancún, Los Cabos o Puerto Vallarta, el formato sigue siendo rentable; en plazas más pequeñas o con perfil familiar latinoamericano, los “solo adultos” tambalean en temporada alta.
Sobre Tulum, Gonzalo fue franco: “El lujo perdió foco cuando la infraestructura se quedó atrás.” Hoy el reto es democratizar el destino, ofrecer tarifas realistas y recuperar equilibrio entre sustentabilidad y rentabilidad.



Innovar sin perder la esencia
Las nuevas generaciones de resorts —mencionó— buscan un balance entre entretenimiento, gastronomía y respeto ambiental. La sustentabilidad ya no es accesorio; es condición.
Certificaciones como Bandera Azul, manejo responsable de recursos y diseño con sentido ecológico marcan la pauta. Ejemplos como Secrets Maroma Beach o Secrets Akumal lo demuestran: proyectos concebidos con sensibilidad ambiental que obtuvieron 5 Diamantes AAA y mantienen alta rentabilidad.


Detrás de cada éxito, insistió, hay un principio inamovible: planificar antes de construir, escuchar a operadores y arquitectos, y recordar que la experiencia empieza mucho antes del check-in.
Una nueva etapa, sin despedidas
Hoy, Gonzalo del Peón inicia una etapa más tranquila, aunque no menos creativa. Vive entre Filadelfia y Miami, sigue colaborando como consejero en asociaciones y grupos hoteleros, y se actualiza en marketing digital.
En paralelo, cultiva su otra pasión: la música, y conserva el mismo rigor con el que dirigía juntas ejecutivas.


Epílogo con aroma de café y elegancia
Aquel desayuno en la Hacienda de los Morales cerró como empezó: entre risas, reflexión y una taza de café servida con la misma hospitalidad que Gonzalo del Peón predica.
Con Zozaya, Del Peón y Coll como trinidad fundacional, el todo incluido latinoamericano encontró su identidad global.
Y aunque Gonzalo deja los reflectores operativos, su legado permanece como esas grandes obras que no necesitan firma para ser reconocidas.
Porque si de hospitalidad se trata, él no solo creó una marca: creó una manera de entender el placer de viajar.

